Perro bastante duro pero muy llamativo debido, principalmente, a su capa con pelo largo y seco, el Pastor de Brie, está teniendo una aceptación cada vez mayor, demostrando una gran capacidad como perro de guarda y de compañía además de cumplir con gran eficacia su función habitual de cuidador de animales. De origen francés, tiene un carácter bonachón y afable que lo hace particularmente adecuado para convivir con niños. Entre otras cosas, de él se ha dicho que, precisamente, por encariñarse muchísimo con su amo.